Secretos de un Superanfitrión experimentado

Nikki fue de las primeras en Airbnb en obtener la categoría de Superanfitrión cuando lanzamos el programa por primera vez en 2014. Mantuvo la categoría durante más de 16 trimestres consecutivos.

¿Qué hace Nikki? Aprendió a ser anfitriona desde cero. Comenzó con una pequeña cabaña en su patio trasero en San Francisco. Le fue tan bien con ese anuncio, que decidió dar otro paso y compartir su casa de tres dormitorios entera durante las vacaciones familiares.

A continuación, Nikki comparte los secretos de su éxito como Superanfitriona.

“Hace seis años, en Provenza, Francia, me quedé en un alojamiento en Airbnb por primera vez, y me encantó. Era un pequeño monoambiente en la Ciudad Vieja de Aix. Se ajustó muy bien a nuestras necesidades, pero los anfitriones no habían puesto mucho esfuerzo en hacerlo encantador ni nada por el estilo. Entonces, me di cuenta de que si invertía un poco de dinero, podría hacer algo muy especial con la pequeña casa de huéspedes de 18 metros cuadrados que tengo en el patio trasero. Asumí que recibiría reservas muy de vez en cuando, pero me sorprendió cuando se reservó de inmediato durante una semana completa”.

“Cada vez que publico un anuncio nuevo, empiezo con un precio inicial que va del 50 al 70 % del precio de mercado, hasta que tenga al menos tres evaluaciones (o hasta que reciba tantas solicitudes de reserva que pueda ajustarlo a los precios de mercado). Hago esto para poder resolver los inconvenientes sin perder la oportunidad de recibir buenas evaluaciones, y porque es importante recibir muchas evaluaciones lo antes posible para que el anuncio aparezca más arriba en los resultados de búsqueda”.

“Todo comienza con un buen espacio. Tiene que estar limpio. Me gustan los espacios amplios y ventilados. Sin objetos en el medio, pero con puntos esenciales de diseño que atraigan la mirada. Todo tiene que ser cómodo, especialmente las camas. Invierto en colchones de memory foam y a la gente le encantan. Realmente se trata de un ejercicio de empatía. Caminá por el espacio y pensá cómo va a usarlo la gente. Luego adaptá tu concepto de diseño en torno a eso”.

“Tener buenas fotos marca la diferencia. Las fotos profesionales son imprescindibles. Pienso en el espacio en sí, en si es un espacio familiar o ideal para cierto tipo de viajero, y lo pongo en el título. Escribí una buena descripción que sea muy detallada y atractiva para atraer a la gente al anuncio. Describí las camas, las sábanas, las marcas de jabón o los servicios que ofrecés”.

“Asegurate de incluir descripciones de las particularidades de tu espacio en el anuncio. Explicalas de forma honesta y clara, pero no las conviertas en un factor completamente negativo. Lo importante es ser lo suficientemente transparente para que los huéspedes elijan el alojamiento que les guste”.

“Para mí, la comunicación es la regla n.º 1 para ser un buen anfitrión. La comunicación directa con un huésped comienza con su primera pregunta. Cuando recibo una solicitud de reserva, siempre les hago algunas preguntas a los huéspedes potenciales. No lo hago por curiosidad ni para meterme en su vida privada, sino para asegurarme de que el alojamiento sea adecuado para ellos. De verdad, el proceso para obtener una evaluación de 5 estrellas comienza en ese momento”.

“La sorpresa más grande para mí es lo maravillosos que son los huéspedes. La gente es muy honesta, amable y comprensiva. Y en cuanto a lo económico, los ingresos me sorprendieron. Cuando me metí en esto, no esperaba que me fuera tan bien, y mucho menos convertirlo en mi profesión. Me enfoqué en las cosas que realmente me gustan de recibir huéspedes y aproveché las oportunidades cuando se presentaron, y todo salió muy bien”.